Y en aquel Hospital, en aquella incierta habitación, allí estaba sentado el niño, sobre el colchón ortopédico de esa triste y confesora cama...
Con la mirada perdida hacia el infinito, soñando con el día que podrá salir de aquellas cuatro paredes... soñando que los sueños deben y pueden cumplirse... soñando que el cielo debe esperar y que la vida no puede ser antagónica con la felicidad y que los suspiros deberían reconfortar el padecimiento...soñando que el viento en su rostro debería hacerle llorar...soñando que sus pies sangren por todo lo andado... soñando que todas las noches la luna le abraze y dejar que el sol entre cada mañana por la ventana, y le deslumbre con rayos de inocencia y optimismo...
Que las riquezas le sobran y le faltan abrazos y besos, que el tiempo no se compra y vivir, puede ser un lujo...
Que no quiere seguir llorando a escondidas y que su almohada siga siendo su resignación.
Que sus venas bombeen optimismo y que las agujas dejen de torturarle, para simplemente, poderle sonreír a la vida.
Se abrió tímidamente la puerta de la habitación...
.- Hola Corazón, qué tal estás? Estás triste? Dijo aquella profesional y humana enfermera.
.- No. Estaba soñando, dijo el jovencísimo paciente.
.- Mira Cariño, te he he traído unos comics de superhéroes para que te entretengas y sueñes también con sus heroicas misiones...
- Gracias pero no. No me hacen falta, yo ya tengo mis propios héroes, ellos si que no me fallan nunca y nada se les resiste.
.- Hacen lo indecible para lograr sus metas; sufren con alegría porque saben que llegarán al final; lloran recordando y ríen pensando, duermen soñando y corren convincentes de su estravagante solidaridad...
.- Están aleccionados para divulgar su locura por doquier, almas respetadas por dónde van y dejando una severa huella de su impronta. Iconos de generosidad. Mis vikingos del sur... almas generosas que recorren kilómetros de sufrimiento recompensados con el aplauso y la pleitesía.
Ellos son mis héroes.
Verdaderos creadores de ampollas y divulgadores de una locura incomprensible, irracional, ilógica e inhumana...
Cuando sea mayor y ya no esté aquí, esté donde esté, quiero ser como ellos... esos locos con faldas que eclosionan lo imposible con el sufrimiento, argumentando su locura con solidaridad, empeño, sufrimiento y convicción, y todo esto, sin abandonar nunca la sonrisa...
.- Y como se llaman esos superhéroes?
.- Los maestros de lo imposible, los dueños de la perseverancia, exportadores de infinitas sonrisas y los creadores de una magia inusual...
.- Ellos son los BeerMenZ... Los okupas de nuestros pequeños corazones..
Caballeros, infinitas gracias!!!
Dedicado a D. Manuel Tenllado, D. Francisco Contreras y D. Francisco Viegas... Chapó !!!
Fdo. Salvador Delgado Moya.
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