Hace unos días un vecino de calle Larga, se ponía en contacto con nosotros mostrando su indignación y desespero , por el problema que acarrean los gatos callejeros.
Nos contaba que la situación es poco menos que insostenible, manifestaba textualmente " En mi puerta han puesto el cagadero". Seguía contando que se ha puesto en contacto de manera verbal con representantes del ayuntamiento, que no le dan soluciones. Que si la empresa encargada de la recogida de animales, solo puede capturar perros, que si faltan medios y mas excusas. Del mismo modo contactó con una de las personas que alimentan a los gatos, sin prestarle atención alguna.
Culpabiliza en gran parte a las personas que alimentan incontroladamente a los animales, echándoles de comer sin tener en cuenta las molestias que pueden acarrear al resto del vecindario.
Ayer en la página AZ de Casares, leímos que el ayuntamiento de Casares había instalado nuevos puntos de alimentación para gatos ( foto superior), además en dicho municipio malagueño existe una asociación que se encarga de la alimentación de los mininos y que tienen establecido un protocolo de actuación en ese sentido.
Con toda la modestia posible, opinamos que se debería copiar a Casares, y evitar al menos intentarlo la gran cantidad de molestias que traen la alimentación incontrolada, roedores, excrementos, malos olores y posible insalubridad.
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