Nuestro paisano David Martín Oliva, doctor en biología, publicaba el siguiente comentario, que no deja de ser curioso e interesante a la vez, sobre la fuerza que puede tener el COVID-19
Un caso insólito: "Infección por Coronavirus con efecto anti-tumoral"
Hace unos días se publicaba en una revista científica este extraño caso. En este artículo se describe cómo un hombre de 61 años que padecía linfoma de Hodgkin (imagen de la izquierda), y que se infectó por SARS-CoV2, se liberó del cáncer cuatro meses después de la infección (imagen de la derecha).
¿Qué ocurrió? Como ya se había reportado con otras infecciones por microorganismos, la infección vírica por SARS ‐ CoV2 desencadenó una respuesta inmune antitumoral.
En otras palabras, unos de los problemas del cáncer es que las células tumorales no son detectadas por nuestro sistema inmune y por lo tanto no se activan los mecanismos de defensa. En este caso, el enfermo de linfoma, y de COVID, sí activó una respuesta inmune, disparada por el patógeno, que atacó e hizo desaparecer al tumor.
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