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El Cristo de la Buena Muerte, ofrecido a María Zalea (103 años), la abuela de Tesorillo |
Ayer tarde y como viene siendo habitual, desde hace mas de 20 años, tras dos años de ausencia, el Miércoles Santo , el Cristo de la Buena Muerte recostado a hombros de los costaleros de ambos sexos, es ofrecido a los enfermos o impedidos de San Martín del Tesorillo. A la vez coincidiendo con estos ofrecimientos se celebró el Vía Crucis, de las 14 estaciones, 12 tuvieron lugar en la calle y las dos últimas en el templo parroquial . El sacerdote celebrante, impartió la sagrada comunión a cada uno de los visitados
Las paradas antes los domicilios de enfermos o impedidos, se sucedieron de la siguiente forma : 2 en calle Larga, 1 en Ronda Secanillo, 2 en Las Torres, 1 en Casuarinas, 2 en La Fábrica, 2 en San José y 2 en Túnel
Esta salida a la calle de la imagen, está exenta de boato de jolgorio o estridencias. No hay nazarenos, ni música, ni mujeres de mantilla, los costaleros van el traje de calle, la comitiva la forman poco mas de 50 personas. La fiesta, en cierto modo el folclore queda a un lado. Aquí se vive, se siente el auténtico valor de la Semana Santa, el fervor religioso.
Aquellos a los que se le ofrece la venerada imagen, no hay mas que mirarle a la cara, para observar, como les cambia el gesto, como algunos no pueden contener las lágrimas, nos hacemos cuenta que sus corazones sienten y agradecen el bello gesto de tener cerca, besar sus pies a su Cristo
A continuación les ofrecemos una exposición de fotos del acto religioso de ayer. Cada 5 segundos se reproducirá una fotografía, sobre un total de 20
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