Anoche me acordé de ti: Pacurro

 Amigo Juan:

Te escribo esta letras para contarte, que anoche estuve en la pegada de carteles, con motivo de las próximas elecciones municipales que van a tener lugar el próximo 28 de mayo. Se respiró buen ambiente entre los candidatos de las tres formaciones que se presentan a estas elecciones, mucho respeto, mucha educación, por otro lado como debe ser, algo que tú, siempre supiste cultivar, tus ideas, tu militancia, nunca te impidió mantener amistad con otras personas con ideas muy distintas a las tuyas, recuerdo como repetías una y cien veces, yo soy amigo de todos o casi todos, una cosa es la amistad y otra la política

Tengo que confesarte, que mientras estuve atento a captar fotos, de charlas con los diferentes candidatos a concejales, no te recordé, para que mentirte. Ahora bien, una vez que me despedí de los allí presente y enfilé la calle Túnel, como una especie de flash, me vino tu imagen a mi memoria, con  nostalgia y algo de tristeza comenté para mis adentros.  De no ser porqué se marchó  el 13 de julio del año pasado, Juan hubiese estado ahí, en la pegada de carteles, regañando, que el cartel está torcido, si hay que ponerlo mas arriba. Pero tus regañinas  eran inocuas, los que te conocíamos, sabíamos que eras una bendita alma, incapaz de hacer daño a nadie, de saber perdonar a quien te ofendió .

Bueno voy a ir despidiéndome  , solo quería que supieras, que de cierta manera, anoche una vez mas estuviste presente en el inicio de la campaña electoral, como tantas veces hiciste, la mayoría sin apenas ayuda, con el convencimiento que te llevarías un chasco en las urnas, pero tu nunca desfalleciste, como dijo Mao  Tse Tung, " De derrota en derrota, hasta la victoria final", y así fue. No me cabe duda que no fui el único que te recordó, tus compañeros de formación, te rememorarían igual o parecido como lo hice yo.

Me despido, un fuerte abrazo allá donde te encuentres. Tu amigo Pacurro 

Juan González Quesada, conocido como Juanito El Chico, falleció el 13 de julio de 2022, fue un incansable luchador, fiel a sus ideas y por encima de todo un gran tesorillero, amante de su pueblo