Esta mañana en mi paseo matinal, (ocho de la mañana) . Al pasar a la altura del antiguo supermercado Jarillo, escucho el ruido producido al impactar una lata contra el suelo, después resultó ser de Coca-Cola. Me giro y veo la lata, la recojo del suelo y se la muestro a una persona ( no voy a desvelar su género), la cual está al volante de un vehículo, es más la ventanilla del acompañante todavía permanecía abierta, que era por donde había arrojado la lata.
Me dirijo a esa persona mostrándole el envase, con mucha sorna, le espeto, " Se te ha caído esto". Hace un gesto de querer recogerla, a lo que le contesto " No te preocupes, ya la tiro yo al contenedor". A todo esto frente a su automóvil a escasos cinco metros existe una papelera. Abandono el lugar, tragándome todo lo que me hubiese gustado decidle.
Un tanto calentito, continuo con mi paseo, una vez rebasado el edificio El Molino, a pocos metros en el margen de enfrente, observo lo que ustedes pueden comprobar en la foto. Unos desalmados habían abandonado una bolsa de basura sobre una verja, posiblemente animales vagabundos ( perros, gatos) o porqué no salvajes como algún zorro, han roto dicha bolsa y esparcido su contenido.
Allí junto a la calzada, había restos de bebidas, una botella de whisky con resto de liquido, otra con aceite y más restos que lo que parece que fue una comida campestre, a todo esto a escasos cincuenta metros hay dos contenedores de residuos sólidos. Y no hablar de como están otra vez las cunetas de la carretera del Cementerio, atestadas de latas, bolsas, sacos de plástico, etc., etc., etc., Recordar que no hace mucho, un grupo de voluntarios, capitaneados por Pepe Lobo y Edu Collado, la dejaron limpias como un aspe
¿ Para qué poner calificativos?, los dejos a su elección, lo que con pesimismo si pienso, es que muchos no tienen arreglo en lo que a urbanidad se refiere, un ejemplo, la persona que arrojó a la vía pública la lata de coca-cola, es joven, según su apariencia menos de 30 años . Cuando yo tenía esa edad, se presuponía que las futuras generaciones, serían mas educados, mas comprometidas con el medio ambiente, que escenas como las que he descrito, no se repetirían. A las pruebas me remito
Octubre 2020
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