Uno de estos puntos de control de velocidad se encuentra ubicado en la N-340, entre Tarifa y Facinas, en el tramo que va desde el punto kilométrico 80+650 C hasta el 79+400 D. Los otros dos radares han sido instalados en la A-7. El primero, entre San Roque y Algeciras, cubre el trayecto desde el punto 1106+290 C hasta el 1107+540 C. El segundo se encuentra ubicado entre el polígono de Guadarranque y San Roque, desde el 1109+350 D hasta el 1107+340 D.
La DGT ha explicado que con la puesta en marcha de estos dispositivos el objetivo reducir el número, no solo de siniestros mortales sino también de heridos graves, ya que está demostrado que la velocidad no solo afecta al riesgo de verse involucrado en un siniestro de tráfico sino también que, a mayor velocidad más difícil será reaccionar a tiempo para prevenir el siniestro y más graves serán las lesiones producidas a consecuencia de éste.
Durante el primer mes de funcionamiento, los conductores que circulen a una velocidad superior a la permitida por las carreteras donde están ubicados estos nuevos radares, recibirán una carta informativa advirtiéndoles de que han sido captados por un radar con exceso de velocidad. Pasado este tiempo, el conductor que supere la velocidad será sancionado y recibirá una multa con el importe correspondiente.
La puesta en marcha de estos nuevos radares se enmarca en el Plan de instalación de 122 nuevos puntos de control de velocidad en 2025 que incluye 32 nuevos radares, 7 fijos y 25 de tramo en distintos puntos de España.
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