El pasado octubre fuimos testigos de una escena entrañable, casi mágica y así lo contamos . Un minino sin dueño, de vida libre y espíritu salvaje, había hecho del cementerio y sus alrededores su hogar. Pero lo más curioso era su comportamiento cuando la Sala de Velatorios se llenaba de gente. En esos momentos, este pequeño felino se acercaba con sigilo y, como si comprendiera el dolor ajeno, se instalaba entre los presentes, buscando caricias y repartiendo consuelo con su sola presencia.Leer aquí
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| Foto de la gatita en la Sala Velatorios (octubre 2024) |
Esta gatita no era una cualquiera. Dueña de su destino, demostrando su destreza como cazadora incansable de ratones y pajarillos. Sin embargo, su historia dio un giro inesperado cuando nuestra paisana Mari Vázquez, gran amante de los animales y en especial de los gatos, decidió cambiar su destino. Con su cariño y paciencia, le encontró un hogar en una finca del término municipal de Jimena, donde una familia estaba dispuesta a darle el amor que merecía.
Al principio, había dudas. ¿Cómo aceptaría la pequeña su nuevo hogar después de haber vivido tanto tiempo en libertad? Pero los temores se disiparon pronto. Hoy, la gatita se ha adaptado maravillosamente y disfruta de su nueva vida, como lo demuestra el precioso vídeo que compartimos con vosotros. Un final feliz para esta pequeña alma errante que, sin buscarlo, terminó encontrando un hogar y una familia.
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