Ayer motivado sobre todo, por los actos religiosos del Corpus, no nos ocupamos de Bernardo. Hoy de modo resumido hablaremos de la jornada de anteayer y de ayer.
Hace dos días nuestro caminante llegó a Tarragona, si prendado quedó de la ciudad de Valencia, mas aún quedó de Tarragona, la describió como una ciudad preciosa, limpia y muy bien cuidada, además de aportar ruinas romanas, de incalculable valor histórico.
De la jornada de ayer, lo mas significativo fue el fuerte calor, con el añadido de una gran cantidad de humedad, que hizo del camino un auténtico infierno, nos contó que llego a beber cinco litros de agua, pueden hacerse una idea, de como apretó el calor, su final de etapa fue en la localidad de Francas, un pequeño pueblo tarraconense.
Mañana hablaremos de su llegada hoy , a una localidad muy turística, que también ha gustado mucho a nuestro intrépido paisano
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