Bernardo posa con la catedral de Santiago al fondo |
Ayer nuestro peregrino, junto con sus 9 compañeros, llegaron hasta Santiago. Según nos confesaba Bernardo, las sensaciones son difíciles de describir, la emoción, la alegría y la pena se vieron entremezcladas.
Pena porqué supone el final de una compañía, inmejorable única, parece mentira que se puedan cultivar amistades en tan pocas fechas y con personas de culturas muy diferentes, es la magia del camino. Anoche tenían previsto cenar juntos, esta mañana han tocado las despedidas
Desde Santiago, ya solo, ha partido hasta Finisterre. Mañana les informaremos como ha ido la jornada de hoy viernes
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