F.QUIRÓS "PACURRO". 28/10/2022
España, ese país lleno de gente que si por algo se puede caracterizar es por apuntarse a cualquier fiesta por el simple hecho de ser una fiesta.Una España regalada, que si el ‘halloween’, el ‘black friday’ o el ‘santa claus’ estadounidenses, la ‘nuit-blanche’ francesa, o el ‘oktoberfest’ alemán, por poner algunos ejemplos
Pocos niños, poquísimos, me atrevo a decir, que saben que son los huesos de santo, los buñuelos de viento, los panellets, las rosquillas de anís, los pestiños, los fallaetes o el pan de higo.. Esa misma mínima cantidad tienen conocimiento , reconocer que en el Día de Todos los Santos, en España es tradición representar el “Don Juan Tenorio” de Zorrilla. Sin embargo, y es lo que duele en el alma, sí saben que en ‘halloween’ se va de casa en casa disfrazado y diciéndoles a los vecinos eso de “truco o trato” para que te den caramelos. Incluso alguno, muy joven, piensa que se ha celebrado “toda la vida” en nuestro país, convencido de que es así, y negando la mayor de que en España se celebra otra fiesta distinta.
En España no se celebra ‘halloween’, se celebra el “Día de Todos los Santos”, una festividad que tiene su origen en el siglo IV, y que conmemora a los mártires de “La Gran Persecución” del emperador Diocleciano. Tantas víctimas dejó a su paso que cuando quisieron recordarlas resultó imposible hacerlo individualmente o por pueblos, así que decidieron honrarles con un día festivo al año. Dicha fecha fue cambiando hasta que Gregorio III, en el siglo VIII, fijara la festividad el 1 de noviembre, pero no sería hasta Gregorio IV, en el siglo IX, cuando se adoptó la festividad en la iglesia cristiana. Desde entonces, todos los países de tradición católica celebran fiestas y rituales en honor a Todos Los Santos. Más de 11 siglos de tradición.
Por otro lado, ‘halloween’ tiene su origen en el “samhain”, una celebración celta precristiana que servía para festejar el final de verano y de la cosecha, y que en el calendario suponía el año nuevo celta, comenzando por la “estación oscura”. De inicios paganos, Roma adoptó la festividad al ocupar los territorios celtas, mezclándose con la “Fiesta de la Cosecha”, ofrecida a Pomona, diosa de los árboles frutales. La fecha terminó consolidándose en el siglo IV, hasta que en el siglo VIII Gregorio III quiso aplacar las celebraciones paganas haciéndolas coincidir con el “Día de Todos los Santos”.
No sería hasta 1840, siglo XIX, cuando la festividad llegaría a norteamérica de mano de emigrantes irlandeses, que huían de su país por culpa de la hambruna. Una vez allí surgiría la historia de “Jack el Tacaño”, fruto de la cual la fiesta adoptaría la figura del ‘Jack-o’-lantern’, calabaza gigante hueca con una vela dentro que aseguraban alejaba a los espíritus ese día. Y a pesar de todo, ‘halloween’ no se celebraría masivamente hasta 1921, cuando se produjo el primer desfile en Minnesota. O lo que es lo mismo, una fiesta “tradicional” con menos de un siglo de existencia.
En nuestro país, el Día de Todos los Santos se celebra el 1 de noviembre, día festivo no laborable en todo el país. Y el día 2 se conmemoran Los Fieles Difuntos, de gran arraigo desde hace siglos. Esa relación entre la vida y la muerte en España proporciona tradiciones como la costumbre de visitar las tumbas de los seres queridos, limpiándolas y engalanándolas con flores frescas y algunos rezos. Los cementerios se llenan de gente, de olores y de colores. Y la añoranza y tristeza hacia quienes ya no están entre nosotros se endulza con todo tipo de productos típicos de cada región. Así surgen dulces como los huesos de santo, buñuelos de viento, panellets, rosquillas de anís, pestiños, fallaetes, borrachillos y pan de higo, entre otros. Y además, en cada región también se ha personalizado la festividad.
Si has leído todo el artículo, ahora te toca valorar. Pon en el lado de una balanza las fiestas de tu tierra y de tus ancestros, y pon en el otro lado la fiesta llevada a negocio de tierras extranjeras y dudosa tradición. Tendrás que elegir, ambas se celebran el mismo día, no cabe ambigüedad. A todo esto los ayuntamientos, los colegios, con la complicidad de los padres, promocionando, gastando dinero público, para realzar esta fiesta intrusa.
Que quede meridianamente claro, que respeto a todos aquellos que estén a favor de Halloween. Es mi opinión, que puede que no sea la correcta, pero estoy totalmente convencido de ella
Con el debido respeto: No a ‘halloween’ en España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario