La Droguería de la familia Blanco Martín, cumple en estas fechas medio siglo de existencia. Pacurro que fue su primer dependiente, ha querido recordar la efemérides con el siguiente escrito, publicado en el programa de feria. No mucho más tarde, concretamente en 1975, Pacurro comenzó sus colaboraciones con los programas, revistas o libros de ferias, sin duda es el mas longevo en ese apartado
Por estas fechas, vísperas de Feria, en Junio de 1973, abría al público Droguería Blanco . Ubicada en los locales comerciales del bloque de viviendas, que se extiende a lo largo de la Plaza de la Constitución, en el tramo comprendido entre las calle Túnel y San José, pocos años antes las viviendas de los pisos superiores habían sido habitadas y no fue el primer comercio instalado en los locales comerciales en abrir. Eso sí fue el mas espacioso, el de más metros cuadrados, causando sensación . Sus propietarios que aun continuan, el matrimonio compuesto por Martín Blanco y Lourdes Martín.
Se da la circunstancia que el primer dependiente de ese ya emblemático negocio, fue quien suscribe, contaba yo solo 18 años , he de confesarles que de pinturas y demás productos de droguería, no tenía ni “ pajorela “ idea, la verdad que aprendí pronto. Por ese motivo, porqué fue mi primer empleo remunerado y también por supuesto por la amistad que me une con sus dueños y familia, guardo unos inmejorables recuerdos, a la hora de redactar el presente, sin pretenderlo , la nostalgia me ha visitado
Recuerdo perfectamente la primera clienta, que entró al local, aquella mañana de junio de hace 50 años, me estoy refiriendo a Josefa Uceda, para que la identifiquen, esposa de Alejandro Sánchez Anaya, que explotó una panadería un montón de años en la calle San Roque, junto al Bar La Parada, es más recuerdo perfectamente el artículo que compró, un bote de disolvente ( aguarrás), de la marca Dipistol por un importe de 10 pesetas, afinando todavía mas, me acuerdo casi a la perfección del dialogo que mantuvimos.
El elemento principal como corresponde a una droguería, eran las pinturas, destacando dos marcas que eran las más solicitadas, Titanlux y Bruguer, en víspera de Feria se vendía como rosquillas, un plástico para exteriores de marca Emultone . Se fueron añadiendo otros artículos, de perfumería, regalos, menajes del hogar, etc. Durante lavíspera de Reyes, a lo largo de los años, la afluencia de clientes era bestial, teniendo que recurrir a personal de apoyo
En mis dos años como dependiente, por supuesto que ocurrieron anécdotas, una de ellas.En Diciembre de 1973, en un pequeño transistor, estaba oyendo en RNE, el programa de Luis de Olmo, Protagonistas, cuando de repente emitieron música clásica, mas tarde supe porqué, habían atentado contra el almirante Carrero Blanco. Otra mas agradable, los Reyes de 1974, se organizaron desde la droguería, un grupo de jóvenes, todos barbilampiños, nos hicimos cargo de dicha organización, tuvimos que alquilar los trajes de los reyes, contactamos con una señora ( muy desconfiada) de Málaga, que nos alquiló los trajes, nuestro emisario fue Francisco Martín Domínguez ( El Chorlo), camionero que viajaba diariamente hasta la capital de la Costa del Sol, ¿ el dinero, como lo conseguimos?, pordioseando, en aquel años, el ayuntamiento y sus representantes en nuestro pueblo, simplemente nos tenían olvidados .
Como decía anteriormente, a lo dos años, encontré otro trabajo mejor remunerado, con pena dejé el trabajo, porqué me sentía muy a gusto, pero la cuestión económica mandaba. A mí me sucedió, Manoli Sánchez Villalba y a esta Sara Rodríguez Martín, María José García Lobato, la hija de los propietarios Lourdes Blanco Martín y en la actualidad su hermana Rocío
No deseo para nada, ponerme transcendental, intenso, pero no me resisto a decidles. ¡Que pronto han pasado 50 años !, cómo decía el sabio, “ A este mundo venimos de visita”, extraigan conclusiones, si lo desean . Larga vida a Droguería Blanco, como mínimo otros 50 años mas, eso sí , yo no estaré para contarlo
Francisco Quirós “ Pacurro”

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